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domingo, 27 de junio de 2010

Alive - Pearl Jam


“Hijo, dijo ella: tengo una pequeña historia para vos, quien creías que era tu papá era nada más que un…”



La historia de esta canción es una muestra acerca de que en determinados momentos la posibilidad de resignificar algún suceso difícil de nuestro pasado (que no haya sido superado) nos permite reconstruir nuestro presente y seguir adelante.
O también puede ser la confirmación de que las madres a veces pueden ser muy hijas de puta.


Alive (o La Maldición)

Esta es una pequeña historia que me gusta llamarla “la maldición”: la canción “Alive” que está en nuestro primer álbum fue la primer canción que escribimos como grupo, y que tocamos cientos de veces en vivo, ha sido realmente transformada a través de los años; no por la forma de tocar, o por los arreglos, sino por la interpretación.

La historia original que cuento en la canción es la de un adolescente en algún lugar, recibiendo algunas verdades shockeantes. Una de estas es que el hombre que creía era su padre cuando estaba creciendo, no lo era. Y la segunda era que el verdadero padre había muerto algunos años atrás. Como si ser adolescente ya no fuese suficientemente duro. Cuando la mamá le revela esta información de la muerte de su verdadero padre, hizo que el chico, que no estaba lo suficientemente inestable en ese momento, se tornara aún más confuso. Esto lo se porque conocí al chico… No bueno, pero… quiero decir, el chico era yo, pero no me conocía bien por ese entonces.
Para ser honesto estaba muy mal como para reconocerme…

Entonces él toma estas noticias como una maldición: “me contás estos secretos que supuestamente debo perdonar… pero tengo que encontrar la forma de vivir con esto… encontrar un padre muerto, pero sigo vivo y tengo que lidiar con eso. Fue una maldición: Yo sigo vivo (I’m still alive).

Algunos años después estábamos tocando para públicos más y más grandes y respondían a esta maldición de una manera que nunca había pensado: saltando alambrados, usando sus cuerpos para expresarse, gritando, cantando juntos “I’m still alive”, en masa.

Entonces, cada noche, cuando veo al público reaccionando positivamente es realmente increíble. El público cambia el significado de estas palabras.

Cuando ellos cantan “I’m still alive” es como una celebración, y este es el punto: Cuando ellos cambian el significado de esas palabras, rompen la maldición. (Eddie Vedder)


Para escuchar: Vivito y coleando.






domingo, 20 de junio de 2010

La Sed Verdadera - Luis Alberto Spinetta

“Pero la paz, en mi nunca la encontrarás.

Si no es en vos, en mi nunca la encontrarás”



En 1973 Spinetta grabó “Artaud” un disco solista con el nombre de su anterior banda, Pescado Rabioso.
Una de las tantas perlas de ese disco es “La sed verdadera”, que puede parecer una dulce canción de amor, pero sin embargo remite a algo más, a la experiencia individual, experiencia que como tal es intransferible.
El momento en el que uno entiende que es uno el único responsable por sus elecciones, el único capaz de alcanzar sus propios deseos, de saciar su sed verdadera.
Si bien cada uno de nosotros puede contar sus experiencias personales, lo que compartimos es un relato. No podemos transferir nuestra propia experiencia, lo que sentimos. Posiblemente eso nos hace particularmente distintos.
De hecho esto que escribo, poniendo en palabras sensaciones e interpretaciones, es el intento de transferir una experiencia a través de un relato, lo que podría considerarse una contradicción. Pero en definitiva la contradicción también es inherente al ser humano, ¿para qué negarla?
De alguna manera Spinetta también confronta a cierta idea de “comunidad”, idea bastante arraigada en la adolescencia (hacia fines de los ‘60 era una consigna fundamental del movimiento hippie).
Al escucharla puede generar cierta melancolía por lo que fue, casi siempre pensando en una relación sentimental, pero la canción convoca a hacerse cargo de uno mismo, a crecer desde esa óptica, a tomar las riendas de tu vida, que en definitiva sos vos… o en este caso mejor dicho, soy yo.
Sólo Spinetta y su guitarra… creo que su simpleza la hace tan mágica.

Curiosidades:

- La sed verdadera “se supone que es la única sed insaciable y a la vez la única posible de ser saciada” dirá Spinetta años más tarde al presentar la canción en su acústico para Mtv.

- Si algo define al disco es su diseño. Hoy vemos en las disquerías una imagen extraña con una fotito del "poeta maldito" dentro de la misma. Sin embargo en su origen esa imagen extraña, verde y amarilla, de “Artaud” era un disco vinilo deforme con varias puntas. En esa época los dueños de las disquerías no sabían donde ponerlo, ya que no encajaba en las bateas, donde todos los discos eran…. Cuadrados.


Para escuchar: relajado… y solo, tal vez.

domingo, 13 de junio de 2010

Tangled Up In Blue - Bob Dylan

“Siempre sentimos lo mismo, sólo que lo vimos desde un punto de vista diferente”



Blood On The Tracks, grabado en 1974, fue el regreso de Bob Dylan a las primeras planas. En mi caso fue el disco con el que conocí a Dylan; la canción con la que comienza es todo un manifiesto, tiempo y espacio en permanente tensión dentro de un relato en primera persona, honesto y preciso, sobre un momento, una etapa en la vida de una persona, en donde podemos encontrar (entre tantas otras cosas):




El comienzo y el final de una relación.

El crecimiento inevitable, aún a pesar de uno mismo.

La búsqueda constante.

El reencuentro.

La insatisfacción y la satisfacción con la vida que uno elige.

El reconocimiento de uno mismo en el presente y el desconocimiento de uno mismo en el pasado, en el presente.

Las batallas que se pierden… y también las que se ganan.



¿Todo eso en una canción? Algunos pueden pensar que estoy exagerando, pero en definitiva, estoy hablando de Bob Dylan, uno de los más grandes artistas del siglo XX. Esta canción de amor/desamor así lo confirma.

Versiones:


1- Una versión preliminar, sin los arreglos y la fuerza que finalmente quedó en la edición final del disco, aparece en "Blood on the tracks: The New York Sessions". Las sesiones que Dylan decide desechar porque no había quedado conforme.


2- Otra versión corresponde a la gira The Rolling Thunder Revue realizada en 1975, donde se distancia de la historia cantando en tercera persona lo que en el disco canta en primera persona.


3- La mejor versión que escuché de esta canción la realizó KT Tunstall hace unos años en un tributo a Bob Dylan realizado para la BBC, altamente recomendable, pueden buscar el video.


Para escuchar: y exacerbar tu melancolía y/o tristeza.